martes, 24 de mayo de 2011

Hace calor

Pleno verano y aún en mayo. Se hace raro ir a clase después de haber pasado la mañana jugando al voley y en la piscina; y es que no sé yo qué voy a hacer en los exámenes, que empiezan en nada. Con este tiempo se hace difícil encerrarse en el cuarto a hincar los codos.

Vuelven las noches con la ventana abierta de par en par y las mil vueltas hasta encontrar esa posición en que no moleste la espalda recién salida del horno. Parece que el cuerpo entero cambia y sólo se trata de otra época del año, pero es verdad que se está mucho más receptivo - conociendo gente nueva, de esa que parece que sólo sale con el sol. Y aunque (casi) todo vuelve a ser nuevo: ¿cómo evitar la nostalgia viniendo del eterno verano? Imprescindibles temas como éste que sigue en días así.

 

Y como reza otra imprescindible de los Rodríguez: desde un rincón del mundo, brindo contigo... Salud!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario